domingo, 31 de mayo de 2009

El Hijo de la Novia o como Suar nos tiene como hijos a todos

Hagamos un cocktail, tomemos a un ex galancito devenido ahora en actorcito famoso, a un viejo actor decrépito y a una actriz que se tuvo que volver de Hollywood porque no le daban ni siquiera un papel de mucama. Agitemos bien y agreguémosle unas gotitas de producción Suar, que a diferencia del Rey Midas, todo lo que él toca se transforma en bosta. Eso sumado a la dirección de Campanella, digno sucesor de Enrique Carreras, terminan logrando un nuevo aborto del cine nacional. La historia es una montaña rusa de sentimentalismo chabacano, que parece salido de una propaganda de Telecom; y sus momentos de humor, herederos de La Tuerca, quieren tener su mayor gracia denigrando a la Iglesia, sagrada institución que vela por la salud, el hambre y la paz en el mundo. Las actuaciones son lamentables, desde Ricardo Darín, que intenta ocultar su prominente barriga, vistiéndose de negro; a Hector Alterio que lucha por mantener en su lugar su dentadura postiza. Yo me pregunto cuando podremos volver a disfrutar de esas excelentes películas para toda la familia, que filmaba Palito Ortega, como “La Sonrisa de mamá”.....
Por Arnaldo Cocota